A la tarde, luego de hacer algunas labores por casa, volví a salir al camino, volví a Noia para hacer algunas cosas que tenía pendientes, como comprar yerba mate que ya solo me quedaba para una cebadura, así como otras cosas que me encargó Rosa. Y la hermosa tarde, me inspiró, me generó ese impulso de alegría, de ilusión, de buena onda, de optimismo y felicidad, que se coronó con ese ramo de flores para mi esposa.
Y ahí voy, caminando por el malecón, aprovechando el día, disfrutando de cada rayo de sol, gozando el viento fresco en la cara y todo ese ambiente estupendo que nos da vida. Esta es mi forma de hacer las cosas, así sin pensarlas demasiado, emprendiendo todo como una experiencia, como una novedad, como algo que me puede aportar alguna enseñanza. Podemos indagar, buscar información, pensar y darle mil vueltas a las cosas, de todos modos al final los resultados solo se pueden ver en el terreno de juego, enfrentándonos a la realidad, sin miedo, con fuerza y actitud positiva.
Les mando un abrazo!!!!!
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