La tormentosa mañana no impidió que saliéramos al camino, afortunadamente Rosa me llevó y me esperó mientras hacía algunas compras. Ahora ya en casa, reflexionando sobre ello, me doy cuenta de lo difícil que hubiera sido cruzar el puente con el temporal de lluvia y viento de hoy. Supongo que alguien lo habrá hecho, yo no he visto a nadie a pie por allí cuando cruzamos en el coche. En estos momentos, mientras escribo encendí la calefacción y al finalizar me pondré a cocinar con alegría, ilusión, buena onda, optimismo y felicidad, hoy toca un guiso de lentejas, algo caliente para capear el temporal.
Aprovechen el día, a pesar de la profunda borrasca, siempre es posible disfrutar y gozar de todo lo que la vida nos va poniendo en el camino. Todo tiene que ver con nuestra capacidad de observación y de ponernos manos a la obra en el instante en el que surgen las oportunidades. Así es como podremos detectar esos elementos capaces de activar nuestras emociones positivas.
Compartir esas emociones, esas experiencias, es algo suma mente gratificante, desinteresado, solidario, valiente y al mismo tiempo es un acto ejemplar, con un gran impacto en nuestro entorno cercano.
Les mando un abrazo!!!!!
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